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Consumo

La tecnología que nos hará la vida más fácil en 2024

Fnac anticipa las tendencias tecnológicas que marcarán el año y los productos más disruptivos que veremos pronto en nuestros hogares.

26 marzo, 2024 00:00

La tecnología nos acompaña, nos hace la vida más fácil y nos abre la puerta a opciones que apenas podíamos soñar apenas unos pocos años atrás. Miramos con admiración y curiosidad hacia un futuro no tan lejano en el que se perfilan dispositivos casi de ciencia-ficción que, no obstante, cada vez se hacen más reales y llegan a nuestras casas en menos tiempo.

La constante evolución tecnológica es una tendencia que nos define como humanos pero que, en las últimas décadas, se ha intensificado de manera exponencial en casi todas los frentes, haciéndonos más fácil nuestras rutinas y llevando a otro nivel el entretenimiento. Por ejemplo, ha cambiado definitivamente la manera que tenemos de comunicarnos y de consumir cultura; y, por supuesto, estas novedades también repercuten de forma manifiesta en nuestro estilo de vida, incluso en detalles impensables hace años.

Esta efervescencia de innovación hace que estar plenamente al día de todas las novedades y de los productos que llegan al mercado sea algo complicado para el usuario. Por eso, llegados a este punto, es cuando adquiere especial relevancia el rol de empresas como Fnac. La compañía lleva más de tres décadas ofreciendo las últimas novedades en sus establecimientos pero, tan importante o más que su catálogo, es el énfasis en dar una atención personalizada de máxima calidad lo que ha marcado la diferencia durante todo este tiempo: Fnac acompaña a sus clientes, les asesora y pone en su mano toda la información relevante para que identifique qué producto se adapta mejor a sus necesidades.

La telefonía es, seguramente, el sector en el que todo este nuevo paradigma se hace más visible. Cada año se lanzan infinidad de nuevos modelos, nuevas referencias con características inéditas en muchos casos que suponen un salto adelante en el concepto, diseño y funcionalidades que dejan relegada casi al olvido la experiencia del pasado. Hitos como el lanzamiento del primer móvil plegable, en 1996; la tecnología Bluetooth (1999); la revolucionaria llegada del primer iPhone (2007); o los primeros smartphones plegables (2018) son solo algunos de los episodios más relevantes de esta carrera histórica hacia un futuro. El asesoramiento de Fnac hace posible que esta transición hacia el hogar sea más accesible que nunca.

En paralelo a esta evolución,durante las últimas décadas también hemos asistido al nacimiento y progresión de varias tecnologías de uso común, como la Wi-Fi. Cuando comenzó a llegar a nuestros hogares, en 1999, auguraba un gran potencial, pero tal vez no al punto de considerarla algo imprescindible, como ocurre actualmente. De la misma manera se puede hablar de la Inteligencia Artificial, hoy tan en boga, pero que ya en 1997 logró sus primeras victorias -en sentido literal-, como aquella que sirvió para darse a conocer a gran escala al derrotar al por entonces campeón del mundo de ajedrez Gary Kasparov en una mítica serie de partidas.

Tecnologías que nos cambian la vida (a mejor)

Pero ni siquiera hace falta asomarse a estas grandes tecnologías para reflexionar acerca del cómo ha cambiado nuestra vida y nuestras rutinas. En casa, podemos beneficiarnos de los asistentes personales que responden a nuestros comandos de voz, por ejemplo; o la introducción de la robótica para que sea un dispositivo ad hoc quien limpie los suelos por nosotros. Fue la propuesta de iRobot que, con el lanzamiento de la Roomba en 2002, dio el primer paso de un sector inédito entonces pero que hoy está plenamente integrado en los hogares como punta de lanza de la domótica, una rama nueva enfocada al control inteligente y autónomo -en parte- de los parámetros y tareas más relevantes de nuestro hogar.

Del mismo modo atendemos a cómo ha cambiado la movilidad urbana en base a la electrificación de las bicicletas o los patinetes modernos, que empresas como Razor han sabido reinventar para adaptarlo a los usos actuales, en los que se han posicionado como un medio de transporte más dentro de nuestras ciudades.

La manera de consumir cultura también ha evolucionado mucho respecto al pasado. Aunque el libro de papel mantiene su buena salud, la irrupción de los ereader de tinta electrónica ha ampliado las posibilidades de los lectores. Gracias a este invento de Sony, desde 2004 cualquiera puede llevar una biblioteca en el bolsillo.

Con la música ocurrió algo similar: las discotecas digitales permitieron que toda nuestra música nos acompañara cada minuto para disfrutar de ella dónde, cómo y cuándo quisiéramos. Puede que pocos dispositivos resulten tan icónicos en el mundo de la tecnología como el iPod de Apple, que fue el pionero en ofrecer hacer realidad esta utopía y hacerlo, además, con un diseño único que ha trascendido su propio uso. Son algunos de los ingenios más emblemáticos, pero no los únicos, que nos han cambiado la vida: las impresoras 3D (2009), los pendrive como sustituto de los disquetes (2000), entre muchos otros que presagian avances inimaginables hoy en día.

El futuro que viene este mismo año

El futuro, por tanto, se escribe -y se vive- a base de ideas disruptivas que poco a poco van calando en la sociedad y transformándola, de alguna manera. Por eso resulta especialmente relevante atender a las tendencias que las principales compañías tecnológicas apuntan como protagonistas en los próximos meses.

Es otra faceta en la que Fnac puede aportar la autoridad que le conceden estas tres décadas de experiencia acercando a sus clientes el mercado cultural y tecnológico. La compañía ha estado presente en la mayor parte de los lanzamientos, por lo que se ha convertido también en un referente a la hora de identificar las tendencias que marcarán la tecnología en el futuro.

Es una ayuda crucial para entender el dinamismo de las grandes empresas tecnológicas, cuya competencia es un acelerador de estos cambios que se traducen en dispositivos de todo tipo con prestaciones cada vez más avanzadas. A grandes rasgos, parece que muchas de estas innovaciones basan su potencial en tres grandes campos. La realidad aumentada es una de estas tendencias. Apple, por ejemplo, está apostando con mucho énfasis en ello y por eso ha generado muchas expectativas en torno a sus Vision Pro que, según la rumorología, están a punto de salir al mercado. Se trata de otro producto llamado a la consideración de icono por su propuesta rompedora: la posibilidad de interactuar con nuestro entorno en tiempo real.

Es un paso más allá de lo que propone la realidad virtual, si bien este entorno también será protagonista este año con la propuesta de Meta, por ejemplo, que ha mejorado las características de modelos previos en las nuevas Meta Quest 3. En este caso, se insta al usuario a integrarse en un mundo virtual con infinitas posibilidades en todos los ámbitos. Son diferentes propuestas, ambas con un extraordinario potencial, que confieren a los espacios en los que nos movemos habitualmente posibilidades se multiplican.

La era de la inteligencia artificial

Gemini es el ecosistema de inteligencia artificial de Google.

Gemini es el ecosistema de inteligencia artificial de Google.

Muy ligado a lo anterior está la inteligencia artificial. Ya hemos visto cómo, desde su irrupción, ha ido evolucionando hasta posicionarse como una de las tecnologías más versátiles y con mayor potencial a día de hoy. Su presencia y sus usos, cada vez más espectaculares, son motivo de asombro y de debate en muchos foros, pero lo cierto es que, en nuestros entornos más cercanos, se posiciona igualmente como una herramienta que nos puede resultar muy útil en el día a día: buscar y presentar información, resolver dudas de todo tipo, analizar datos, identificar patrones, mejorar la edición fotográfica… se trata de una especie de navaja suiza con un potencial ilimitado que ha llegado para quedarse

Y es que, en el futuro más inmediato, su presencia también será constante en muchos productos tecnológicos que manejamos. A lo largo de 2024 su protagonismo en muchos de los productos que pongan en el mercado las grandes tecnológicas será una constante, como ya hemos visto en estas primeras semanas del año.

Es el caso, por ejemplo, de Samsung, que acaba de estrenar una línea de smartphones basada en ella o su simpático Ballie, un pequeño robot personal. Google también está incidiendo en esta faceta, con la incorporación de este paradigma en sus Pixel y con la puesta de largo de Gemini, que también será de uso común este mismo año. En esta línea también verá la luz el Rabbit R1, un dispositivo que hará frente al ecosistema de los smartphones a base de inteligencia artificial y un sistema operativo propio.

Estas características se benefician de la constante progresión en la velocidad de procesamiento y en las cada vez más rápidas redes de las que también hace uso el internet de las cosas, otro de los pilares de lo que viene próximamente y cuya utilidad permitirá avanzar en el campo de la domótica. Homepod, el nuevo altavoz inteligente de Apple que está previsto para este mismo año, llamado a ser su mejor representante, si bien Google y Sonos también preparan lanzamientos en esta línea.

Homepod de Apple.

Homepod de Apple.

Además de estas grandes tendencias, las marcas también tienen en puertas lanzamientos de productos diferenciales para el hogar que se pueden encontrar en Fnac y que le dan una vuelta a los dispositivos más cotidianos. Es el caso del televisor OLED T de LG, previsto para el segundo semestre del año y que presenta un panel transparente como principal característica.

En el campo de la informática, Asus lanza su Zenscreen Fold, el primer monitor plegable de un portátil. Lenovo también se apunta a este carrusel de novedades con su Thinkbook 13x Gen 4, un portátil con tapa de tinta electrónica. Y, dado que la movilidad adquiere cada vez mayor relevancia, Amazfit ha querido dar un paso más y lanzar su Helio Smart Ring, un anillo inteligente que lleva los wearables a otro nivel, ubicando en nuestro dedo funcionalidades similares a las de un smartwatch. ¿Ciencia ficción? No, el futuro que ya está aquí.